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Hay tantos tipos de espectadores como personas habitan el mundo

¿Qué sería del teatro sin espectadores y espectadoras? Buenas tardes lectores y lectoras, este mes de febrero quiero dedicar este espacio a aquellas personas que dedican su tiempo en desplazarse hasta el teatro, sentarse en la butaca, dejarse el dinero, comprar un abono, etc. y ser cómplices de la magia que supone el teatro o la performance.

Ser espectador no es nada fácil, no creáis que, con tan solo ir al teatro, sentarse y mirar lo que sucede encima del espacio escénico es fácil. Porque no lo es. Hay tantos tipos de espectadores como personas habitan el mundo. Aunque los clasifiquemos en colectivos y grupos. Si vas al teatro acompañado o acompañada, al salir de ver la función podrás descubrir que cada individuo tendrá unas opiniones diversas y sobre todo, destacará momentos o elementos de la pieza en cuestión que habéis compartido diferentes. Esto es lo enriquecedor del teatro. Las múltiples opiniones tras ver la obra. Algunas son más objetivas, otras más subjetivos, etc. También quiero destacar que no todo vale en teatro, todo tiene que estar justificado en escena, tiene que tener una coherencia, un hilo conductor y un por qué. No vale colocar los elementos, a los y las intérpretes de un modo u otro porque sí. Eso no vale, lo siento.

Por este motivo, las personas que nos dedicamos al mundo de las artes, no sólo las escénicas, nos tenemos que cuestiones las diversas formas que se generan en relación a cómo los espectadores son parte de la producción escénica. A partir de mediados de los años 60 es cuando se empieza a tener en cuenta que el público es mucho más que unos meros espectadores. Por lo tanto, el funcionamiento de las artes escénicas se ha ido ocupando de pensar también en los espectadores y públicos que asisten a las representaciones. Pocas veces se ha profundizado en lo que sucede fuera de los límites de la propia obra, el texto, el director/a o los y las intérpretes. En la actualidad nos exigimos analizar las diversas formas y consecuentemente los mecanismos que las artes escénicas ofrecen en nuestros días. Esto viene a resaltar que los hechos y la manera de vincularlos con las imágenes escénicas y los artefactos estéticos han cambiado. La sociedad de hoy demanda otras cosas, otros formatos y tenemos que adaptarnos.

Así pues, es importante reivindicar la posibilidad de que el graderío asistente tome la autoridad de construir su propia dramaturgia a partir de lo que ve sobre el espacio escénico. Esto no es lo habitual, porque, por el contrario, la mecánica predominante es la de que el público se asienta y contempla, piensa aquello que el o la directora quiere decir y por lo tanto, el público ha de entenderlo como tal. Esto no es así, la mente y el arte es subjetivo y por mucho que alguien se empeñe en persuadirte en algo tú vas a sacar tus propias conclusiones.

El autor Raúl Castagnino en su libro Teoría del teatro argumenta que los públicos son como una parte de un complejo mecanismo de relaciones entre diversos agentes de la creación teatral, optando a ser protagonistas del hecho escénico que integran y determinan los contenidos y formas del hecho artístico, es decir: el dramaturgo; la obra en sí misma, el texto literario; el director escénico; el actor o actriz; los accesorios escénicos; el espacio escénico y los espectadores. No obstante, la conjunción de ellos y sus interacciones determinan y condicionan también los mecanismos a través de los cuales los públicos pueden ser incluidos o excluidos.

Por otro lado, Lucina Jiménez expone en Teatro y públicos la importancia de los agentes sociales externos al hecho teatral como, por ejemplo, y cito textualmente: “diseñadores y ejecutores de políticas que, enmarcan la práctica y actividad en todas sus fases: producción, difusión y consumo”.  De este modo, Lucina alude a los productores/as y gestores/as culturales, ya bien sean de instituciones públicas o privadas; centros de formación; becas y crítica teatral especializada y formada en artes escénicas; investigación y sus resultados; organizaciones gremiales y profesionales relacionadas con las artes escénicas; legislación y, por último, los medios masivos de comunicación y redes sociales.

Sin embargo, Antonin Artaud nos propone un paradigma ubicado entorno a un lugar distinto el cual, estimula a los espectadores a deconstruir su postura tradicional y de costumbre de cómo ver teatro y la performance.

Y os preguntaréis como llegamos ante estas reflexiones o dónde podemos encontrar estos argumentos que aportan esta línea de reflexión. Pues bien, Flavio Desgranges en su libro En La Pedagogía del Espectador argumenta y cito textualmente: “estimular en el espectador el deseo de lanzar una mirada particular hacia la obra teatral, de emprender una investigación personal en la interpretación que se hace de la obra, despertando su interés para una batalla que se libra en los campos del lenguaje”. Esto implica la necesidad de prestar atención al valor educacional intrínseco del acto de asistir a un espectáculo de artes escénicas o performance.

A veces uno sale del teatro conmovido o pensativo, sin saber qué pensar o qué ha visto, ese es el efecto más importante del teatro, cuando uno sale con cierta incertidumbre. Es importante que, al salir, uno o una repose y le de vueltas a lo que ha visto, investigue y lea sobre aquello. De este modo descubrirá opiniones que se asemejen a la suya o no, hallará que su reflexión es otra, ahí es donde os animo a que escribáis lo que pensáis con respeto y cariño hacia el trabajo de los demás, pero siempre aportando lo bueno y lo malo, pero siendo constructivos, nunca destructivos.

Por lo tanto, si tuviéramos que realizar nuestra propia dramaturgia tenemos que ser conscientes de dónde se va a realizar, si hay una posible gira a qué espacios se irán y ante eso, adaptar la propuesta escénica de manera que sea maleable y dúctil. También debe ser fácil de trasportar. También hay que tener en cuenta a qué tipo de público va a ir dirigido o hacia qué tipo de público, yo, como dramaturgo/a, guionista, etc. quiero dirigirlo y ante eso atenerme a la consecuencias y posibles críticas negativas. Durante la historia ha existido diferentes tipos de teatros, entiéndase teatro como, por un lado, edificio arquitectónico e institución y, por otro, como espectáculo escénico. Es por ello, que desde siempre ha existido teatro para la gente más erudita, como podría ser la ópera o ballet, y teatro para el proletariado como el sucedido en los corrales de comedia del teatro del siglo de oro. Hoy día sigue sucediendo, se hace teatro para todos los públicos y tú tienes la libertad de asistir, si la economía y el tiempo te lo permite a lo que te apetezca. En definitiva, pertenezcas a una clase culta, proletaria, infantil, adulta, discapacitada, etc. permítete ir al teatro con la mente abierta y en disposición de dejarte llevar aportando los cincos sentidos en aquello que vayas a ver. Te aseguro que la experiencia no te dejará indiferente.

“El espectador también actúa, como el alumno o como el doctor. Observa, selecciona, compara, interpreta. Liga lo que ve con muchas otras cosas que ha visto en otros escenarios, en otros tipos de lugares. Compone su propio poema con los elementos del poema que tiene delante. colocado en situación frente a una producción escénica está en condiciones de asociar y disociar discursos, signos, artefactos, producciones que le permitan generar sus propios discursos».

Telón.

The Show must go on

El espectáculo debe continuar

Nicolás Gallego Fernández

Bibliografía

BADIOU, Alain. Imágenes y palabras: escritos sobre cine y teatro. Editorial Manantial, Buenos Aires, 2011

CASTAGNINO, Raúl. Teoría del teatro. Compendios Nova, 1956.

DESGRANGES, Flávio. A pedagogia do espectador. Sao Paulo, Editora Hucitec, 2003.

JIMÉNEZ, Lucina. Teatro y públicos. El lado oscuro de la sala. México, Escenología, 2000.

PAVIS, Patrice. El análisis de los espectáculos. Buenos Aires, Paidós, 2000.

RANCIÈRE, Jacques. El espectador emancipado. Buenos Aires, Bordes Manantial, 2010.

 Pensar los públicos de teatro de Gonzalo Vicci Gianotti:  http://asimetrica.org/wp-content/uploads/2017/11/Conectando-Audiencias-11-Gonzalo-Vicci.pdf   (13/02/2022)

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